Grifos de ducha
Cuando se trata de comprar los grifos para tu baño será necesario que tengas en cuenta varios aspectos importantes. Los grifos para ducha solo tienen una salida de agua que va hacia el mango de ducha. Su diseño suele ser más compacto para ocupar lo menos posible en el espacio de ducha.
Lo primero a tener en cuenta es el estilo de tu baño para que todos los elementos del mismo conjunten. Algo que te da buenas pistas para ello son las formas de los productos, si predominan las formas redondeadas o las formas cuadradas.
Los fabricantes de grifos, en la búsqueda de ahorro en el gasto de agua así como de energía por razones ecológicas y económicas, han desarrollado diferentes sistemas con los que pueden venir equipados los grifos.
Reductor de caudal. Es un sistema que se pone a la entrada del grifo y que consigue reducir el volumen de agua que entra. Así se consigue que el caudal sea hasta un 50% menor y que podamos ahorrar agua, teniendo una experiencia de uso del mismo muy agradable.
Hay dos grandes tipos de grifos de ducha, los monomando que mediante un cartucho cerámico y el movimiento a derecha o izquierda vas regulando la entrada de agua fría y caliente. El otro tipo es el termotático que tiene un mando para regular el caudal de agua y otro la temperatura.
En el caso de bañera y ducha tienes que valorar el grifo sea termostático, pues te ofrecerá más confort al conseguir la temperatura deseada más rápido y además consiguen mantener esta temperatura a pesar de que alguien abra otro grifo en la casa.
También te ayuda con el ahorro de agua y energía gracias a esa rapidez en alcanzar la temperatura, que hace que no dejes el grifo tanto tiempo abierto hasta que el agua sale a la temperatura deseada, menos agua perdida y menos tiempo de uso de la caldera.
Los grifos termostáticos también te aportan mayor seguridad, pues disponen de un bloqueo a la temperatura de 38º que impide que por accidente tu o cualquiera de tu familia, sobre todo niños, se puedan quemar al abrir el grifo.